Escenógrafo, diseñador de vestuario, actor, director de cine y hombre de teatro. Gerardo Vera, fallecido este domingo a los 73 años de edad, era un auténtico hombre del renacimiento de nuestra industria. Director del Centro Dramático Nacional entre los años 2004 y 2011, cuenta entre sus premios con el Goya al Mejor Diseño de Vestuario por El amor brujo y con el Goya a la Mejor Dirección Artística por La niña de tus ojos. Además, fue distinguido con el Premio Nacional de Teatro.
En su faceta como realizador, dirigió las películas La celestina y Una mujer bajo la lluvia. En televisión, firmó el imaginativo espacio de Televisión Española Viaje con nosotros.
Vera conoció el cine desde pequeño. En una entrevista con AISGE, recordó cómo el reparto de la superproducción Orgullo y pasión se alojaba en su casa. «En 1956, a mis nueve añitos, a Sophia Loren le ponían ¡en mi cuarto! las pestañas postizas para la película. Aún recuerdo hasta el sillón rojo de terciopelo. Era un dormitorio muy grande, una casa solariega. Mi padre era un jefazo de la Falange y en el pueblo no había hotel: por eso se alojaron en mi casa. Ahí estaban también Cary Grant, del que recuerdo unas grandes manos; y Frank Sinatra, dolorido, recostado, porque Ava Gardner estaba en Madrid, a 50 kilómetros, detrás de Luis Miguel Dominguín, y no le hacía caso».
También recordó su primera película en tecnicolor: «El mayor espectáculo del mundo, con un impresionante Charlton Heston. Quedé tan fascinado que me convertí en un compulsivo coleccionista de los programas de mano. Toda mi infancia y mi adolescencia se condensan una serie de cajas de cartón en las que ordenaba los carteles por directores y actores. Me mandaba mi abuela a jugar con los chicos, pero regresaba a las cajas de cartón a los cinco minutos».
