El retrato humano e ideológico de Mario Camus

Fotografías de Alfredo Guibert · 29 septiembre, 2022

La Academia recuerda al cineasta cántabro con la proyección de Mario Camus según el cine, de Sigfrid Monleón

Mario Camus ejemplifica lo que para mí es un director de cine: una persona que lucha y valora su oficio, que está convencido de lo que hace, que no deja pasar nada”. Sigfrid Monelón se acerca con respeto y admiración al cineasta cántabro en Mario Camus según el cine, un recorrido por la cinematografía del director fallecido el 18 de septiembre de 2021, con el que la Academia recordó a uno de los grandes del cine español y maestro en la adaptación de obras literarias de Miguel Delibes, Camilo José Cela y Benito Pérez Galdós.

El director de Los santos inocentes “empujó” a Monleón para que hiciera su primera película. Pero, más allá de esta razón personal, el realizador y guionista valenciano filmó el testamento cinematográfico del que definió como “cineasta de relaciones” para reconocer “la profundidad humana de su cine”. El resultado es “un retrato humano e ideológico de Mario Camus, al que filmé poco porque cuando veía una cámara se ponía en guardia”, con secuencias íntegras de su cine.

Contó Monleón que le llevó tres años poner en pie este largometraje documental. “Me decían que Mario, que no es un cineasta obvio, no quería entrevistas, que no estaría dispuesto, pero estuvo de acuerdo desde el principio. Y gracias al productor Andrés Santana y a Majós [la madre de la hija pequeña de Camus, Teresa], lo sacamos adelante” .

El responsable de Mario Camus según el cine destacó el cuidado y precisión que ponía en todas sus películas, y habló de las historias que rodó con Raphael y Sara Montiel, de su humildad, de lo poco amigo que era del protagonismo y de las historias que filmó en los noventa, “que pasaron un poco desapercibidas, pero vistas hoy son muy interesantes porque hablan de los desahucios, la memoria histórica, ETA, los GAL… Su mirada es permanente y muy sólida a lo largo de su carrera”, recalcó.

Monleón también apuntó que Camus no veía sus películas por televisión, “pero estaba siempre atento a los títulos de crédito, porque me dijo que no quería olvidarse de los que habían hecho sus películas”. Y en el encuentro que siguió a la proyección, también relató que cuando conquistó el Oso de Oro por La colmena, en el jurado estaba Joseph L. Mankiewicz. “Se acercó a Mario y le dijo: dirán que lo que ha hecho usted es fácil de hacer, pero usted y yo sabemos que no es así”.

Dos autores

El cineasta valenciano compartió el encuentro posterior a la proyección con la actriz María José Alfonso, protagonista de Con el viento solano; y el presidente de la Academia de Cine, Fernando Méndez-Leite.

La actriz señaló los silencios y las miradas del cine de Camus, su buen ojo para elegir repartos, su timidez y su humildad. “Era un gran humanista”, apostilló.

Buen amigo del homenajeado, Méndez-Leite indicó que Mario Camus según el cine “era muy difícil, porque su obra es tan extensa, tan variada, habla de tantas cosas… Es el cine en primera persona. Es muy personal de Mario y es muy personal de Sigfrid, es una película de dos autores”, apuntó.

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