El cineasta Pedro Almodóvar recibió este jueves de manos de la actriz Tilda Swinton el Premio Donostia del Festival de San Sebastián, 44 años después de debutar en la sección Nuevos Realizadores con Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón. En su discurso, el manchego ha afirmado que su “pasión por el cine” ha dado una dirección a su vida y probablemente le ha salvado de muchos peligros. “A mi edad un premio como el Donostia puede indicar el final de un camino, y una recompensa por haberlo recorrido, pero yo no lo vivo así. Para mí el cine es una bendición o una maldición. No intuyo otro tipo de vida que el de escribir y dirigir sin pausa”, ha declarado, al tiempo que ha advertido de que la alternativa “es el vacío”.
“Mi vocación ha sido y sigue siendo más fuerte que yo y todo lo que me rodea”, ha sentenciado antes de añadir: “este oficio es el mejor del mundo y merecía la pena que yo me entregara a él sin limitaciones. Más que nunca, el cine es mi vida y mi vida no tendría sentido sin el cine”. A su juicio, “la vida, tanto en la ficción como en la realidad, es compleja y entraña multitud de peligros, pero sin libertad, la vida no merece la pena”.
El cineasta, que el miércoles cumplió 75 años, ha querido terminar su discurso con un consejo: “hagamos lo posible por que las grandes tragedias, el dolor cotidiano, la incomprensión, la mentira, la falta de empatía, la injusticia social, el odio, todo lo negativo imaginable, hagamos que pertenezca a la ficción y que la vida real trascurra de un modo justo, en paz, y muy entretenida por las ficciones que solo existirán en nuestras pantallas. Sé que pido demasiado, pero siempre ha sido así, desde que llegué a Madrid en 1970, pretendiendo dedicarme a dirigir películas. Muchas gracias por este premio, y gracias por escucharme”.
Almodóvar suma su nombre al de otras personalidades del cine español que ya cuentan con el premio honorífico más importante del Festival: Fernando Fernán-Gómez (1999), Paco Rabal (2001), Antonio Banderas (2008), Carmen Maura (2013), Penélope Cruz (2019), Víctor Erice (2023) y Javier Bardem (2023).