Eliane Caffé, por el cine comprometido

Por Chusa L. Monjas · 17 septiembre, 2016

La realizadora brasileña presenta Era o Hotel Cambridge en el apartado Horizontes Latinos del Festival de San Sebastián

«Todo lo que alimente y ayude a que la película tenga público estimula mucho», defiende la que es una de las mayores revelaciones del cine brasileño contemporáneo, Eliane Caffé, autora de Era o Hotel Cambridge, única coproducción con participación española en Horizontes Latinos, sección dedicada al cine latinoamericano y una de las más relevantes señas de identidad de Zinemaldia.

Ganadora de Cine en Construcción el año pasado en San Sebastián, premio que garantizó la posproducción del filme, esta coproducción entre Brasil, Francia y España retrata la situación del movimiento brasileño de mujeres sin techo y de los refugiados, que ocupan un edificio abandonado en el centro de São Paulo, frente a la tensión diaria provocada por la amenaza de desahucio. “Quería mostrar la vivencia y percepción de cómo nuestras ciudades van convirtiéndose en un gigantesco laboratorio de experiencias étnicas y políticas sin precedentes”, destaca esta comprometida realizadora cuyo nombre es sinónimo de una película de autor.

Y Era o Hotel Cambridge, que está a medio camino entre la ficción y el documental y cuenta con actores profesionales y no profesionales, no es una excepción. «Manifiesta la degeneración de valores humanos a la que está conduciendo el sistema capitalista y destaca lo que tienen en común los trabajadores de rentas bajas y los refugiados e inmigrantes que llegan de todos los sitios del mundo: la falta de vivienda y de los derechos humanitarios más básicos”, señala.

De “mirada polifónica y más auténtica sobre lo que es el movimiento okupa y cómo son las personas que luchan por una vivienda digna” califica su propuesta Caffé, que coordina colectivos audiovisuales en zonas conflictivas del interior de Brasil.

La autora de los premiados largometrajes Kenoma y Narradores de Javé, se decantó por la fórmula de la coproducción “por necesidad, pero también fue una elección. El principal valor de esta fórmula es que abre espacios para la exhibición en el extranjero. Debería haber más acuerdos entre el cine europeo y el latinoamericano, que es muy diverso y muy potente. Con la tecnología digital, quien busca puede encontrar un nuevo cine de ‘quebrada’ que está surgiendo poco a poco como contrapunto al del mercado. Hablo de un cine más épico, menos novelesco, de bajo presupuesto, más arriesgado que aún no se exhibe mucho en los grandes certámenes”.

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