La 72 edición del Festival de Cannes toca a su fin, y a falta de conocer quién se alzará con la Palma de Oro y si se cumplen los pronósticos para Pedro Almodóvar y Dolor y gloria, el certamen desveló el viernes los premios de ‘Una cierta mirada’. Y en la segunda sección más importante del festival por excelencia del cine de autor, el cine español tiene un lugar destacado en el palmarés.
Oliver Laxe, que presentó O que arde, ha sido distinguido con el Premio del Jurado por esta historia del regreso a casa de un pirómano, la primera en gallego que compite en el certamen francés.
Con esta nueva distinción, Laxe hace pleno en Cannes: tres selecciones y tres reconocimientos. Con su primer largometraje, Todos vós sodes capitáns, se alzó con el premio FIPRESCI de la Quincena de Realizadores de 2010; con Mimosas logró el Gran Premio de la Semana de la Crítica 2016; y ahora revalida la apuesta de la muestra con su tercer largometraje en el apartado dedicado a las películas más innovadoras y atrevidas.
“A los cineastas españoles que intentan hacer un cine esencial en un momento en el que el cine en España está tan polarizado”, dedicó Laxe este galardón en su discurso, “para que sigan haciéndolo”.
Por su parte, Albert Serra fue distinguido con el Premio Especial del Jurado por Liberté, cinta que retrata la vida de la aristocracia francesa poco antes del estallido la Revolución. Habitual en La Croisette, el cineasta catalán participó en la Quincena de Realizadores con Honor de caballería (2006) y El canto de los pájaros (2008), y presentó en sección oficial fuera de competición La muerte de Luis XIV en 2016.