«Me pareció un guión extraordinario, diferente. Yo creo que esta película será un clásico. Lo tiene todo y además tan bien hilvanado… aunque debe ser la quinta vez que la veo y hoy casi la he entendido». Entre bromas y chascarrillos transcurrió el coloquio con un simpático y divertido Joan Pera que, el pasado 27 de enero, recibió de la Acadèmia del Cinema Català el premio Gaudí de Honor-Miquel Porter 2019 en reconocimiento a sus 50 años de trabajo en la pantalla, televisión, teatro y como actor de doblaje.
«¿Qué quieres de mí?» fue la primera pregunta que le hizo al director de la multipremiada Celda 211, Daniel Monzón, la primera vez que le vio. «Le dije que era un papel muy importante para alguien que no había hecho mucho cine… a lo que me contestó: no hagas cine, eres el personaje. Y eso me convenció». Para este actor, que lleva toda su vida dedicado al teatro, donde ha protagonizado obras como La extraña pareja junto a Paco Morán o La jaula de las locas, «las grandes interpretaciones no son las que lo haces muy bien, sino en las que sirves una verdad. Y este hombre está sirviendo una verdad». Reconoce haber sido muy feliz en teatro. «Puedo estar cansado, pero cuando llega la hora de hacer teatro, es mi relax».
Su primer filme fue en 1982 (La rebelión de los pájaros) y no reapareció en la pantalla grande hasta 2008 con Forasters. A sus 70 años, este veterano intérprete reconoce que le habría gustado hacer más cine. «Me gustaría interpretar Esplendor en la hierba… aunque sería feliz con cualquier papel que sea bonito y al que pueda darle un poco de mí, aunque sé que eso no es de gran actor». Y es que confiesa que «en el cine te miman mucho, te cuidan y te quieren tanto que estás todo el tiempo en una nube».
Voz de Woody Allen, en catalán y castellano, y de tantos otros actores (Mr. Bean o Jack Lemmon), confesó que aunque le intentaron ofrecer un papel en Vicky, Cristina, Barcelona no lo consiguió: «fue difícil porque no hablo inglés y eso era un hándicap». Además reconoció con gracia que confluía con otro elemento importante, «si yo salía ahí, ¿quién le doblaba a él?», y se conformó con un pequeño cameo. «Ahora que vuelve a rodar este verano en Barcelona, volvemos a las andadas».
Premio Gaudí de Honor-Miquel Porter 2019
«Me sorprendió mucho que me dieran el Gaudí porque no he hecho tanto cine. No me lo esperaba, aunque cuando supe que a Chicho le daban el Goya de honor por dos películas, pensé que bien me lo podían dar a mí por cuatro», reconoció Pera. «Me lo han dado por el conjunto a mi labor como intérprete, aunque me habría gustado que me la dieran por mejor actor. El problema de que te den un premio así es que, si al día siguiente no te mueres, es un problema: tienes que reinventarte otra vez, tienes que buscar una película donde puedas sacar un poco la cabeza. A los 80 años me encontraréis buscando una película o trabajando», sentenció.