Integrado en los programas de museos, galerías, exposiciones y festivales, el videoarte, uno de los formatos más habituales en la escena artística contemporánea, salió de sus circuitos habituales y se reencontró con el público de la Academia. Dentro del ciclo ‘Más allá del cine’, en la institución se proyectaron 15 piezas videográficas de distintos artistas y cineastas, creadores presentes en la colección Inelcom, artistas de AVAM (Artistas Visuales Asociados de Madrid) y de MOMU&No ES.
Tras la proyección, cinco autores de estas obras debatieron sobre si este lenguaje artístico, uno de los más representativos de nuestro tiempo, ofrece mayor libertad creativa que otros formatos como el cine; la importancia de la música en sus trabajos; y las tecnologías empleadas, entre otros temas.
“Son lenguajes muy distintos que, en muchas ocasiones, se cruzan. El videoarte es muy emocional y, como el cine, también quiere contar historias, pero lo hace desde otro espacio y con otras libertades”, indico Lucía Moreno Murillo, que presentó la pieza My Advice for Eva, y, junto a Eva Noguera, realiza instalaciones, vídeo y screening performance.
La artista visual y vicepresidenta de AVAM Rocío Asensi también subrayó que los códigos eran diferentes. “El videoarte es más simbólico, más intuitivo, nace de la emoción y se trabaja de una manera más conceptual. Dicho esto, cada vez se van rompiendo más barreras”, apostilló esta creadora que agradeció a la Academia “la oportunidad de conectar con otro tipo de audiencia. Es importante también mostrar vídeos al público fuera de sus espacios habituales”.
Foto: ©Vanessa Gonzalez
De Val de Omar a Pipilotti Rist
“Cuando estoy rodando un corto o un largo, siempre pienso en el público al que voy a contar la historia. En las videocreaciones y videoinstalaciones, que son pura experimentación, no tengo ese supuesto”, indicó la cineasta Andrea Jaurrieta. En la misma línea se posicionó el artista plástico Antonio Rabazas. “En el cine también se trabaja los conceptos. En el videoarte no hay obligación de que guste lo que hacemos”, manifestó este artista que retrata al hombre vulnerable, desnudo a través de dos bailarinas de danza Butoh -danza japonesa que conecta con el subconsciente-.
La montadora Julia Juániz, por su parte, dejo claro su deseo: “lo que me gustaría es que mis trabajos llegaran a mucha gente”, declaró la montadora, que persigue transmitir la poesía de los colores con la música en su obra Colores.
Los videoartistas Bill Viola, Maia Navas, Mattew Barry, Pipilotti Rist y Ana Mendieta; los cineastas Steve Mcqueen, Agnes Varda, Peter Greenway y Andréi Tarkovski; y uno de los grandes en el cine, la innovación tecnológica, el arte, la literatura y la filosofía, José Val del Omar, son los referentes de estos cinco artistas que participan en todo el proceso de creación de sus propuestas.
En el encuentro programado por la Fundación Academia de Cine en colaboración con AVAM y la Colección INELCOM Arte Contemporáneo, Julia Juániz, Andrea Jaurrieta, Lucía Moreno Murillo, Antonio Rabazas y Rocío Asensi coincidieron en que la clave para distinguir las distintas expresiones artísticas era “la educación”; y en que había aumentado el número de coleccionistas de videoarte.
