En un año marcado por la pandemia y la incertidumbre, desde el Festival de San Sebastián 2020, que se celebrará del 18 al 26 de septiembre, están trabajando por abordar una edición lo más cercana posible a lo habitual. Así lo ha confirmado este viernes el director del certamen, José Luis Rebordinos, durante la presentación de la imagen de esta edición, que protagoniza el actor estadounidense Willem Dafoe.
“Mientras vivíamos con preocupación la situación general pensamos que sería muy complicado tener un festival, ahora honestamente pensamos que vamos a poder hacer un Zinemaldia reconocible y seguro, que infunda optimismo a la ciudad, al territorio y a la industria cinematográfica”, señaló el máximo responsable de la muestra.
Aunque “la evolución de la pandemia determinará su forma final”, la 68 edición pretende mantener sus apartados habituales. Permanecerán en formato presencial la competición de la Sección Oficial, New Directors, Horizontes Latinos, Zabaltegi Tabakalera, Perlak y Nest; las películas con cenas temáticas de Culinary Zinema; Zinemira, Made in Spain y Cine Infantil. Sí se verá afectado el área de industria y los grandes aforos para el público general. “No habrá Velódromo, ni se usará el Museo San Telmo para las actividades de industria, que serán online, salvo el Work in Progress que será online y presencial”, desgranó Rebordinos, que no quiso concretar más “porque a día de hoy no sabemos como serán las indicaciones de las instituciones para septiembre”.
La gran incógnita es si la covid-19 permitirá el desembarco en La Concha de los repartos de los títulos seleccionados y las figuras homenajeadas, especialmente con la situación que se vive en Estados Unidos. “Woody Allen quiere venir, vamos a intentar traer el mayor número del reparto de Rifkin’s Festival”, apuntó sobre la película de inauguración. También en duda está el propio Willem Dafoe –“uno de los mejores actores del mundo, con el que nos une una afectuosa relación desde hace muchos años”–, al que San Sebastián entregó su premio Premio Donostia en 2005 y que en esta ocasión hubiera regresado como imagen de la edición.
La entrega del Premio Donostia a Viggo Mortensen sí está garantizada, ya que reside en Europa. El actor y director estadounidense presentará en el certamen Falling, su debut como cineasta.
El resto de la programación y los detalles de la 68 convocatoria se irán anunciando en las próximas semanas. Para Rebordinos “sería un sueño que pudiéramos tener un 100% de aforo, pero no parece que será así. No va a ser normal al 100%” y, ante las restricciones, se plantea “más sesiones para prensa y acreditados”.
Esta situación mundial extraordinaria arrojará una programación muy distinta de la que tenían prevista inicialmente. Por un lado la pandemia ha perjudicado a los festivales de otoño “porque hay películas, que en otras circunstancias hubieran estado en agosto, que no se han podido terminar. Algunas ni siquiera han podido reanudar el rodaje”; mientras que por otro “ha permitido que títulos que podrían haber ganado la Palma de Oro en Cannes tengan su estreno mundial en San Sebastián”, reflexionó el director de Zinemaldia en la rueda de prensa, donde también destacó la colaboración con otros festivales internacionales, que se cristalizó en el ‘We Are One: A Global Film Festival’.
