Celebramos la 65 edición de SEMINCI con un objetivo muy claro: hacer un festival mayoritariamente presencial (solo las secciones complementarias se han programado online, a través de Filmin), con las más estrictas garantías de seguridad y con la vista puesta en el presente y futuro del cine español.
Me siento muy solidario con Thierry Frémaux, director de Cannes, que decidió no celebrar un festival (siendo el más importante del mundo) por no poder contar con público en las salas. Como recordaba Fernando Lara en un artículo sobre el tema, la palabra “festival” viene de “fiesta” creo que eso debe ser un festival: una fiesta del cine.
Los festivales no los crearon políticos ni gentes del mundo de la cultura sino los responsables del turismo y comerciantes de las ciudades (casi siempre destinos vacacionales) preocupados por prolongar sus temporadas de turismo. Buscaron a quienes pudieran hacer posible su celebración desde el punto de vista artístico, y que además supieran de cine –casi siempre responsables o animadores de cineclubs–. Así nacieron Venecia, Cannes, San Sebastián, Locarno, Karlovi Vary e incluso SEMINCI.
Bajo mi punto de vista, un festival debe consistir en un gran evento en el que se programen proyecciones de la “cosecha del año” de nuevas películas, y donde el público fiel pueda ver e interactuar con actores y directores, con la presencia de críticos y periodistas de cine, capaces de transmitir y visualizar el cine que viene.
Y todo ello sin olvidar la necesaria presencia de las gentes de la industria, debatiendo sobre el presente y futuro de nuestro cine y, por supuesto, dejando un neto “valor añadido” a la ciudad en forma de gran presencia de visitantes y consumo en hoteles, bares, restaurantes y comercios. Sirva el dato de que se ha calculado que la ciudad de Cannes recauda en los 10 días del festival el 12% de todos los ingresos del año.
Este año, en medio de zozobras y oscuras incertidumbres, nos hemos preguntado, más que nunca, ¿qué podemos hacer nosotros, como festival, por nuestro cine? Y, para empezar, decidimos inaugurar la SEMINCI (una vez más) con una película española, como es Nieva en Benidorm, de Isabel Coixet, a quien aprovecharemos para entregar una Espiga de Oro de Honor del Festival, decisión, hay que señalarlo, tomada meses antes de que se le concediera el Premio Nacional de Cinematografía.
En cuento a la presencia de otras películas españolas, la palma se la llevan los documentales, 4 de los 12 que integran la sección Tiempo de Historia. Javier Rioyo (Asaltar los cielos), cuenta en Ángeles con espada, la verdadera historia de la construcción del Valle de los Caídos; Iñaki Arteta relata en Bajo el silencio la difícil reconstrucción de la convivencia en Euskadi tras el final de ETA; Manuel Menchón revela en Palabras para el fin del mundo cómo los falangistas robaron el féretro de Unamuno para pasearlo por Salamanca; y Arantxa Aguirre nos acerca en Zurbarán y sus doce hijos a la figura del pintor y su azarosa vida.
Pero hay más en la SEMINCI de 2020 y es la plena dedicación a la industria del cine español. El sábado 24 de octubre se reunirá el Foro de Mujeres Cineastas en España (creado hace 4 años entre SEMINCI y ‘Caimán Cuadernos de Cine’) para tratar el tema de la presencia femenina en la enseñanza del cine en nuestro país. Las conclusiones se harán públicas en una mesa redonda que tendrá lugar el domingo 25. Ese mismo día, CIMA, la asociación de mujeres cineastas y de medios audiovisuales de España, presentará el balance de la presencia de la mujer en el cine español en 2019 por boca de su presidenta, Cristina Andreu.
El lunes día 26 de octubre celebraremos la Gala del Cine y el Audiovisual de Castilla y León, una tradición en los últimos años, como lo es el Día del Cine Español, coincidiendo siempre con el martes del festival. La jornada se iniciará con una master class de Javier Cámara, mientras en un salón del Hotel Olid los principales representantes de la renovada asociación de directores de cine españoles, ACCIÓN, se reunirán con productores y distribuidores para hablar sobre ‘El modelo del cine español y su futuro’.
Las conclusiones las presentarán a última hora de la mañana de ese día a los medios de comunicación antes de que estos asistan a un encuentro con el propio Cámara, Gracia Querejeta, Julio Medem y Maria Galiana, a quienes se entregará por la tarde en el Teatro Calderón las Espigas de Oro de Honor del festival. Y se hará en una gala en la que se proyectará el largometraje de animación Josep, de Aurel, y el cortometraje El mártir, de Fernando Pomares.
El miércoles 28 de octubre está prevista una nueva edición de ‘Encuentra Distribución en SEMINCI’, una iniciativa creada hace 4 años en la que los distribuidores españoles son invitados a ver en las salas de cine de Valladolid las películas programadas en el festival que no tienen vendidos sus derechos de distribución en España (más del 60%). Moderado por Fernando Lara, este año el debate (que se celebra en la cita de cada año) será ‘El futuro de los festivales y la distribución del cine independiente en España’. Han anunciado su asistencia los más importantes festivales y distribuidores. Esperamos contar con la presencia de representantes del ICAA y la Academia del Cine de España.
En SEMINCI entendemos que los festivales de cine somos capaces de seguir provocando el deseo de consumir cine en salas y, sin duda, uno de los últimos escaparates que el cine independiente y de autor tiene en este país, una vez que las televisiones públicas y privadas decidieron apostar por una pelea de audiencias con cine comercial. Y ello justamente cuando el consumo de este tipo de cine en salas disminuye ante el apabullante empuje de las plataformas.
Algo tendremos que hacer entre todos por nuestro cine en España. Y en ese empeño el cine español encontrará siempre a nuestro festival.
