El ingenio de cuatro titanes

27 enero, 2022

Javier Bardem, Javier Gutiérrez, Luis Tosar y Eduard Fernández dejan clara su complicidad y su chispa en la Academia de Cine

Es un cuarteto para recordar. Javier Bardem, por El buen patrón; Javier Gutiérrez, por La hija; Luis Tosar, por Maixabel; y Eduard Fernández, por Mediterráneo, aspiran al Goya a Mejor Actor Protagonista por unos personajes que han creído y defendido, y con los que han actualizado su condición de nominado a estos premios.

Recibidos con aplausos que se repitieron a lo largo del encuentro, estos cuatro conocidos y reconocidos intérpretes dejaron clara su complicidad y admiración sentados en la sede de la Academia. Buenos amigos, Bardem, Gutiérrez –‘los Don Javis’ para el primero–, Tosar y Fernández han traspasado la barrera de los 50 y siguen teniendo la oportunidad de llenar la pantalla y los escenarios, “lo que es un privilegio”, destacaron los cuatro que en total suman 12+1 Premios Goya.

“Las nominaciones se reciben siempre con una ilusión tremenda, con gratitud y humildad. Si te dan el Goya, pues te pones muy contento, y si no te lo llevas, pues te quedas triste, pero luego no pasa nada. No hay que olvidar que cualquier expresión artística es un acto subjetivo”, comentó Bardem, cuyo nombre ha salido cinco veces en el sobre de los premiados (Días contados, Boca a boca, Los lunes al sol, Mar adentro y Biutiful).

“Hay trabajos a los que uno tiene aprecio y que crees que es una apuesta interesante, y a la gente no le llega. Y al contrario también pasa. Ganar no depende de uno, intervienen muchos factores. Lo importante es que lo que hagas tenga trascendencia, y estas cuatro películas la tienen, su mensaje va más allá de lo cinematográfico”, apuntó Luis Tosar. 

El actor gallego tiene 3 Premios Goya (Los lunes al sol, Te doy mis ojos y Celda 211), el mismo número que Eduard Fernández (Mientras dure la guerra, En la ciudad y Fausto 5.0), quien reconoció que cuando no gana se queda “triste o de mala hostia. Es que cuando mezclas cultura y deporte… ¿Te imaginas a Borges y José Luis Sampedro corriendo los 100 metros valla? Pues eso”, indicó. 

Por su parte, Javier Gutiérrez, con dos estatuillas (La isla mínima y El autor), aseguró sentirse “un convidado de piedra. Estos son las tres hermanas de Chéjov y yo una prima lejana. Es un privilegio estar a su lado”. 

El texto y cineastas en los que confían 

Uno es un empresario de provincias que cree tener controlado todo lo que pasa a su alrededor, otro es el padre de ‘la hija’ y los otros dos se meten en la piel de personas reales: el etarra Ibon Etxezarreta, uno de los asesinos de Juan Mari Jáuregui; y Óscar Camps, icono humanitario por su labor de salvamento en el barco Open Arms.

“El personaje viene con el texto. Veía colores, olores, matices, posibilidades. Me fijé en personajes populares y en el dueño de un bar en el que trabajé que nos trataba muy mal, pero lo hacía con una sonrisa. En el guion decía que Blanco era querido, amado, temido, dicharachero, popular… Vamos, como el rey Juan Carlos, un ladrón”, señaló Bardem, para quien Fernando León de Aranoa es, además de “un hermano, un grandísimo escritor, director y montador. Con él tengo la tranquilidad de poder probar cosas que sé que va a ver”, añadió el canario. 

Manuel Martín Cuenca es uno de los grandes cineastas de este país, todos los actores deberían de trabajar alguna vez con él porque siempre te deja en buen lugar”, destacó Gutiérrez, para quien en el texto “está la mitad de tu trabajo. En La hija, Patricia López Arnaiz y yo interpretamos unos personajes tan siniestros que tuvimos que buscar un punto de luz para que el espectador empatizara”, expuso. 

Lo que encontró Tosar en Maixabel fue “un material muy sensible. Los personajes existen, lo que nos permitió conocer de primera mano una historia muy dura. En mi caso la de un asesino que se ha arrepentido. Y esas ganas de reconstruir y de que ese mensaje se propague puede más que la vergüenza y el dolor. Siempre entendimos que la idea era construir a futuro para los hijos y nietos, lo que siempre decía Maixabel”. 

A Fernández le interesaba mucho Óscar Camps. “A veces el personaje supera al oficio. No quería hacer un panfleto, por eso me gustó que se contaran sus inicios”, explicó el actor catalán, que sigue la máxima del fundador de Open Arms. “Cuando le pregunté si se podía cambiar el mundo, me respondió que cada uno tenía que intentar hacer bien su trabajo”. 

De la pasión por el oficio a la comedia 

Mantienen que su oficio es una carrera de fondo y, conscientes de su privilegiada situación, su sostén es la pasión que sienten cada vez que escuchan la palabra acción. “Ahora empieza lo bueno, yo seguiré viviendo de mi cuerpo”, bromeó Bardem. “Por bien que te vaya, hay que exigirse más y más, ser coherente con lo que haces”, añadió Tosar. 

Compartieron experiencias, anécdotas y la argumentación a la hora de defender la comedia, el género más difícil para los cuatro. “Cuando leí el guion de El buen patrón me reía con algunas cosas, pero lo que me interesaba era el drama, no veía la comedia. Cuando vi la película me sorprendió el humor que tenía. No soy un actor cómico, me cuesta mucho, pero Fernando –León de Aranoa– hila muy fino”, manifestó Bardem. 

Tosar también admira a los que hacen comedia, un género “que se ha convertido en una sucesión de chistes en este país. Me lo pasé muy bien con El buen patrón, una comedia extremadamente inteligente”, apostilló. No es un género frecuente en la filmografía de Eduard Fernández, para quien los reyes de la comedia son “los ingleses. Es que lo hacen todo bien”, una opinión a la que Bardem añadió: “menos el Brexit”. 

Sí lo es para Javier Gutiérrez, que echa de menos las comedias costumbristas firmadas por Berlanga y echa de menos “buenas historias” en este género. Y del género a la película que supuso un punto de inflexión. Para Bardem fue Jamón, jamón, de Bigas Luna, “a quien debo mi carrera y una mujer”, y Antes que anochezca, “que me abrió el mercado internacional”, resaltó el primer intérprete español y por el momento el único reconocido con un Oscar por No es país para viejos.

Flores de otro mundo y Los lunes al sol son las películas más trascendentes para Luis Tosar, mientras que para Eduard Fernández fue Los lobos de Washington, su debut en el cine. Por su parte, Javier Gutiérrez citó La isla mínima y Campeones

Con este encuentro, la Academia finaliza la semana que ha dedicado a la interpretación a través de los testimonios, vivencias, recuerdos y aspiraciones de José Sacristán, Goya de Honor 2022, y de la mayoría de los actores y actrices que optan al Goya por transmutarse en otros –Óscar de la Fuente, Tarik Rmili, Almudena Amor, Jorge Motos, María Cerezuela, Ángela Cervantes, Emma Suárez, Petra Martínez, Blanca Portillo, Nora Navas, Manolo Solo, Fernando Albizu, Sonia Almarcha, Urko Olazabal y Aitana Sánchez-Gijón–. 

twitter facebook linkedin email