‘Hazlo bien, si no, no lo hagas’ –frase que siempre le decía siempre su madre– ha sido la máxima de Sol Carnicero, que recordó a su progenitora cuando recogió el Premio Ricardo Franco por una trayectoria de más de 50 años “al lado de personas que me han inspirado, que han abierto caminos. Ahí era donde quería estar, y creo que lo he conseguido porque tengo buen olfato”, declaró la directora de producción.
Tras un emotivo vídeo con imágenes de algunas de las películas en las que ha trabajado –La escopeta nacional, Patrimonio nacional, Nacional III, La vaquilla, Gary Cooper que estás en los cielos, El crimen de Cuenca, Hablemos esta noche, Esquilache, Los jinetes del Alba, Besos para todos, Horas de luz y Maktub, entre otras–, la que fue la primera mujer directora de producción en España (rol en el que debutó en la cinta Vámonos, Bárbara) también se acordó de Chicho Ibáñez Serrador, Alfredo Matas, Cecilia Bartolomé, Berlanga, Pilar Miró, Josefina Molina, Jaime Chávarri “y de todos los que me ayudaron en mi camino” en la ceremonia que se celebró en el Teatro Cervantes de Málaga.
“Cuando me enteré que me iban a entregar el Premio Ricardo Franco, gran amigo y admirable persona, me dio miedo porque no sabía si lo iba a poder llevar con dignidad. Ganar este premio como directora de producción es todo un orgullo porque se da a los oficios del cine que están en la trastienda y no están reconocidos. ¡Bendito sea el Premio Ricardo Franco!”, alabó la socia fundadora de la Academia de Cine, institución para la que ha coordinado el programa del Año Berlanga.
Al Festival de Málaga, a la Academia de Cine, a la ciudad andaluza “y a todos los que me acompañáis esta noche” agradeció el homenaje, en el que proclamó un sentido “¡viva el cine, viva el cine español!”.
Esta pionera, que logró el Goya a la Mejor Dirección de Producción por Cara de acelga, recogió el galardón acompañada por los productores María del Puy, Pedro Palacios y Luis Ferrón –a los que dio clase en la ECAM–, y el diseñador de vestuario, escenógrafo y dibujante Pedro Moreno. Los cuatro destacaron sus méritos profesionales, pero, sobre todo, pusieron el foco “en la gran persona que es Sol. Tiene una verdad absoluta en su manera de relacionarse con la vida y con el mundo, pero por encima de todo está el amor que respira por lo que hace y por las personas que nos cruzamos con ella”, manifestó María del Puy cuando le entregó este reconocimiento destinado a los técnicos de cine que se creó en homenaje al director, guionista y productor Ricardo Franco un año después de su muerte, en 1999.
