Por su concepto de unidad, por su apuesta por la diversidad y por tener clara siempre la misión que desempeña. Con estas tres poderosas razones, Mariano Barroso resumió por qué el Festival de Málaga es una referencia para nuestra cinematografía cuando recogió el Premio Málaga – SUR en nombre de “tantos cineastas, actrices, actores, directores, eléctricos, maquilladores, directores de fotografía, directores de arte, guionistas… A todos los que forman el cine español y que trabajan con pasión y con un rigor que nos hace sentirnos orgullosos”, declaró.
Una edición especial, las bodas de plata, requería un premio especial, y fue para el conjunto de profesionales del sector audiovisual, representado por la Academia. “Hablar en nombre de nuestro cine es un premio añadido. El Festival de Málaga y el cine español llevan 25 años caminando juntos. Es una excelente plataforma para nuestras películas y un reflejo fiel de nuestra evolución”, recalcó el presidente de la Academia tras recoger la Biznaga de manos del actor, director y productor malagueño Antonio Banderas.
Tras agradecer al director del certamen andaluz, Juan Antonio Vigar; al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; al cineasta y miembro de comité de selección del Festival, Fernando Méndez-Leite; y a Banderas el homenaje al cine español, el presidente de la Academia indicó que la muestra malagueña nació “con vocación de unir a nuestro cine con su público, y lo ha conseguido, su influencia se puede sentir cada día. Además, ha sabido potenciar la diversidad de nuestra cinematografía porque ha tenido claro que ahí radica su riqueza”.
En su discurso, Barroso manifestó que las películas españolas “nos ayudan a entendernos mejor a nosotros mismos. Nuestra misión como cineastas es cubrir la necesidad de ver y de escuchar historias, y debemos hacerlo incitando a nuestros espectadores a la emoción más pura, como hacen los mejores intérpretes. El cometido del Festival es contribuir a que eso ocurra”, apostilló.
De El espíritu de la colmena a El buen patrón. El vídeo que se proyectó en el Teatro Cervantes mostró la evolución del cine español, compañero fiel en el cuarto de siglo de existencia del Festival. “Hay muchos parámetros para determinar la solidez y el arraigo de las cosas, entre ellos el tiempo. Y 25 años de este festival lo acreditan y le dan valor añadido al compromiso de cada una de sus ediciones”, indicó Banderas.
“El Festival de Málaga es cine español y el cine español es Festival de Málaga. Hoy agradezco su labor en nombre de la Academia y en el de todas y todos los que formamos ese conglomerado tan diverso y tan rico conocido como cine español”, remató Mariano Barroso.
