Una sala de espectadores hasta la bandera. Expectantes y acuciados por la curiosidad, compatriotas de Corneliu Porumboiu recibieron al director de la nueva ola rumana entre aplausos y desbordados de preguntas. Tras la proyección de El Tesoro (Comoara), realizado en el marco del 24 Festival de Cine de Madrid-PNR en colaboración con Acción Cultural Española, la Plataforma de Nuevos Realizadores y el Instituto Cultural Rumano, tuvo lugar un encuentro moderado por el periodista Javier Tolentino. El director de ‘El séptimo vicio’ abrió el fuego preguntando a Porumboiu el germen de la película que el público de la Academia acababa de disfrutar –“Hablé con un amigo sobre una leyenda que circulaba en el pueblo de sus abuelos sobre un tesoro escondido. Fuimos con un equipo y un detector de metales a buscar el tesoro. Como no lo encontramos, decidimos hacer una película de ficción, en la que sí lo encontráramos”–.
Su cine se caracteriza por un leve sentido del humor, “algo que me pertenece y del que también extraigo cierto absurdo”, y por un claro interés por la materialidad del cuento, “desde ahí intento crear una perspectiva a través del color y la luz”. Al hilo de haber levantado la producción de esta película con capital rumano y francés, Porumboiu manifestó su descontento por “la casi imposibilidad de rodar un filme con producción 100% rumana. La suerte es que mis películas han sido muy bien recibidas en el mercado francés y en mi país de origen la acogida que tienen mis historias es difícil de definir. Se ven y gustan, pero a aquellos a los que desagrada lo que hago, directamente me dicen que no han podido ver mi película”.
Preguntado por si conocía cineastas españoles de la nueva ola, habituales en festivales, Porumboiu se disculpó –“Lo siento mucho pero no. Me he criado con Luis Buñuel y me apasiona. También he visto cine de Pedro Almodóvar y de Julio Medem”–. Tiene la intención de rodar próximamente una película en nuestro país, pero rotundamente manifestó que no podía avanzar nada del proyecto, “trabajo en un guión del que sólo puedo decir que no se desarrolla en Madrid”.