Más de 300 rodajes se han suspendido en España desde el pasado 11 de marzo a consecuencia del COVID-19, el 52% de ellos españoles y el 48% producciones internacionales, según el recuento realizado por la Spain Film Commission. De ellos, 34 son largometrajes (ficción, documental y animación) y 28 son cortometrajes. Las productoras calculan que las pérdidas están siendo de más de 20 millones diarios. A estos números hay que sumar la paralización y cancelación de estrenos con el cierre de las salas y la suspensión de las campañas de márketing, así como los retrasos de los festivales de Málaga y Cannes. Mariano Barroso, presidente de la Academia de Cine, explicó en la SER que una de las propuestas que el sector audiovisual ha enviado al ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, es «flexibilizar todos los plazos que marcan las ayudas y los contratos» en relación con los estrenos, así como «soporte económico para todas las producciones que accedan a festivales y quieran estrenar en cines». Además, el mundo del cine pide que no se retrasen las convocatorias y que las empresas se puedan acoger a las ayudas del consorcio de seguros, ya que ahora mismo hay en torno a «50 títulos sin fecha de estreno que tienen que salir antes de fin de año», resaltó Barroso.

Las conversaciones han comenzado. Rodríguez Uribes ha hablado con más de 30 representantes del sector para explicarles el plan económico del gobierno. «Queremos que el sector de la cultura no se sienta desamparado», ha declarado, destacando que «la cultura es un bien de primera necesidad tanto en su vertiente social como en la económica y para la convivencia en valores», por lo que ha señalado que a esta primera ronda de llamadas seguirá el «contacto permanente de los directores generales del departamento con el sector».

Entre otras medidas y planes, el cine reclama a través de la Spain Film Commission un plan de promoción de España como destino de rodaje. Pilar Benito, que además de productora en Morena Films es la presidenta de la Asociación Estatal de Cine, lleva más de una semana negociando con el ICAA y su directora, Beatriz Navas. Propone, entre otros puntos, seguir el modelo de la industria china, que se adaptó a las circunstancias y consiguió que sus estrenos más potentes pudieran verse en diferentes plataformas digitales. Unas plataformas que con esta crisis ha registrado un aumento de suscripciones. Filmin y Flixolé, las dos grandes plataformas de streaming de nuestro país, se consolidan estos días de confinamiento con aumentos que van desde el 70% al 200%

ESTRENOS ALTERADOS

Unos la han tildado de faena, otros de trastorno y la mayoría califica de grave una situación que no se sabe cómo acabará ni qué consecuencias acarreará a nuestro sector en particular y a la industria audiovisual en general, no solo en España sino también a nivel mundial.

Cuando aún quedan nueve meses para acabar 2020, se plantea la gran pregunta: cuando esta crisis pase, ¿habrá dinero, tiempo y lugar para filmar y estrenar todo o se perderán un sinfín de historias por el camino?

Mientras todos estamos confinados en casa, unos escriben, otros aprovechan para montar el material grabado y organizar los archivos localizados y muchos buscan la manera de poder seguir adelante con sus proyectos una vez arrecie el temporal, que promete ser intenso.

Películas en pausa

Algunos productores han visto cómo sus películas se caían de la cartelera sin saber si regresarán y, en el caso de que lo hagan, si se verán resentidas. Es el caso de Invisibles, de Gracia Querejeta, que se estrenó el 6 de marzo. “En la semana que estuvo en salas captó la atención de 33 000 espectadores y recaudó casi 200 000 euros, con solo 66 copias. El siguiente viernes, 13 de marzo, íbamos a ampliar a 151 copias, pero lo tuvimos que cancelar todo. Se supone que la película regresará cuando todo vuelva a la normalidad, pero está por ver en cuántas salas, y si la gente va al cine”, explica el productor Luis Collar. El cierre de cines supuso también un final anticipado para Adú, de Salvador Calvo, cuando tenía una buena posición en el top 10 –superando el millón de espectadores– y se estaba consolidando como la película más vista del año, acumulando una recaudación de más de 5,9 millones de euros. “Teníamos un estimado realista de unos 500 000€ de taquilla más, siguiendo el comportamiento que estaba teniendo. Es difícil que cuando se vuelvan a abrir los cines Adú siga bien”, declara el productor Edmon Roch (Ikiru Films).

María Luisa Gutiérrez, directora de Bowfinger Internacional, confiesa que han tenido la suerte de tener rodado “el 99% de Padre no hay más que uno 2. “Nos quedaba una secuencia pendiente de rodaje, que hemos tenido que posponer, pero podemos seguir avanzando y trabajando en posproducción con todo el material”. Su objetivo sigue siendo estar el 17 de julio en los cines, tal y cómo habían anunciado, y “salvo que el estado de alarma o las medidas del gobierno lleven a alargar más la situación e impidan que eso sea así, nosotros estamos trabajando para cumplir fechas. Creo que la sociedad va a necesitar mucha comedia cuando salgamos de esta crisis y va a necesitar compartir experiencias familiares. Queremos contribuir con nuestro granito de arena en dar un poco de alegría”, apunta.

No ha corrido la misma fortuna la próxima historia de Imanol Uribe, La casa 1516, explica la productora: “Teníamos contemplado arrancar en Colombia el próximo 30 de marzo. Esta semana teníamos que estar desplazando a más de 20 actores españoles allí. Obviamente, hemos tenido que posponer el inicio de rodaje. No solo dependemos de las medidas de nuestro gobierno, sino también de las medidas que se tomen en Colombia donde, hace ya un par de semanas, decidieron no dejar entrar españoles. Esto sí es un verdadero drama económico, porque los seguros cinematográficos, de momento, no están haciéndose cargo de los costes de estos retrasos. Todas las coproducciones internacionales están siendo doble o triplemente castigadas desde un punto de vista económico”.

El distribuidor Adolfo Blanco, fundador de A Contracorriente, ha tenido que cerrar los cines Verdi y Conde Duque, y señala que “nos esperan tiempos muy difíciles. En la distribuidora no hemos querido parar la actividad porque eso sería empeorar las cosas, por eso vamos a lanzar nuestros estrenos de abril con el complemento de salas virtuales y online”. De momento,  solo se ha planteado ese sistema para las cintas de abril, con lo que no afecta a las españolas que tienen en cartera. “Para nuestros tres estrenos españoles pendientes estamos buscando nuevas fechas. La lista de los deseos, de Álvaro Díaz Lorenzo -con María León, Victoria Abril, Silvia Alonso, entre otros- y Uno para todos, segundo rodaje de David Ilundain (B de Bárcenas) iban a salir después de Málaga y ahora estamos pensando qué hacer. Resulta imposible tomar decisiones en este momento, con el nivel de incertidumbre que hay. Lo que es seguro es que los rendimientos de cualquiera de las tres estarán muy por debajo de lo que en condiciones normales hubiéramos aspirado a tener, ya que se va a producir un tremendo embudo en el calendario de lanzamientos, y eso con un mercado de espectadores cuya confianza costará recuperar. Nuestro proyecto La contadora de películas seguro que se retrasa, pero aún no sabemos cuánto tiempo, habrá que volver a empezar a encajar todos los elementos. Necesitaremos tener paciencia y muy posiblemente recibir oxígeno, ya que con el que hay no sé hasta cuándo aguantaremos”.

Filmax ha tenido que aplazar El inconveniente, de Bernabé Rico, que estaba previsto para el 3 de abril y se iba a presentar en Málaga; Salir del ropero, de Ángeles Reiné –protagonizada por Rosa Mª Sardá, Verónica Forqué, Ingrid García Jonsson y David Verdaguer– prevista para el 10 de abril; y Una ventana al mar, de Miguel Ángel Jiménez, protagonizada por Emma Suárez, que debía estrenarse el 24 de ese mismo mes. “De momento, esperaremos a saber cómo avanza todo hasta poner una nueva fecha. También tenemos que decidir si La maldición del guapo (de Beda Docampo) la mantendremos para el 8 de mayo”, declaran desde la distribuidora.

Son muchos los que también dependen de cuando se celebre el Festival de Málaga para cambiar o no de fecha de estreno en salas. Es el caso de Crónica de una tormenta, de Mariana Barassi, previsto para finales de agosto –un mes en el que no debería haber ningún problema– si no fuera por la postergación del certamen andaluz; o de Blanco en blanco, la coproducción con Chile de Théo Court que distribuye Elamedia Estudios y produce El Viaje Films, a quienes les gustaría “mantener el circuito de salas pactado y estrenarla a finales de junio, para dar la oportunidad al Festival de Málaga de mantener el special screening previsto”. Pero todos coinciden que hasta que no se levante la cuarentena no se podrán decidir fechas nuevas, como apunta Emilio OLiete de la distribuidora Syldavia, que ha tenido que cancelar Mi gran despedida, de Antonio Hens y Antonio Álamo por el mismo motivo; y La cinta de Álex, de Irene Zoe Alameda, protagonizada por Fernando Gil, Rocío Yaguas y Aitana Sánchez-Gijón, que llegaba el 8 de abril. Sobre este último filme, su productor Charly Granados cuenta que está en conversaciones para ver si puede pasarla a la última semana de junio o la primera de julio, y confiesa que tiene plena disposición a considerar un estreno también en streaming. Se retrasan también La ofrenda, de Ventura Durall, y Uno para todos, de David Ilundain, previstas para el 22 y el 15 de mayo, respectivamente; y Black Beach, dirigida por Esteban Crespo, y que estaba previsto para esta primavera o verano. El documental Rol & Rol, de Chus Gutiérrez -una producción de Turanga Films, Revolution Films, Harold Entertainment y Quexito Films– también ha visto aplazado su estreno en la Sección Especial de Documentales del Festival de Málaga. 

 

El documental Cartas mojadas, de Paula Palacios, iba a tener su première internacional en la sección oficial del certamen malagueño y estrenarse el 5 de Junio. El corto documental Darwin se sienta a la mesa, de Arturo Menor, estaba fijado para el pasado 19 de marzo en Málaga y el estreno internacional en el Festival de Cannes. “Es posible que no lleguen a celebrarse este año por lo que tendremos que replantear nuestro plan de estrenos y ventas”, declara su director y productor. El largometraje documental A media voz, informa la productora Matriuska, se pospone también para más adelante.

 

Avalancha de estrenos

El miedo a la saturación y al efecto embudo es algo que preocupa al sector. No es fácil resolver una nueva fecha ante la avalancha de historias que se espera de aquí a fin de año. El productor y presidente de AGAPI (Asociación Galega de Produtoras Independentes) Felipe Lage (Zeitun Films) que ha tenido que posponer un estreno en salas y parar el rodaje de un cortometraje, cree que “una fecha la encuentra cualquiera, pero el atasco será seguramente monumental. El hecho de que haya más películas y menos espectadores, porque supongo que seguirá habiendo restricciones, tendrá graves consecuencias. Salas garantizadas solo las tienen las distribuidoras americanas y tres directores en España”. Al productor Javier Rueda le preocupa, por lo que ha tenido que aplazar sine die Un trabajo y una película, de Xavier Martínez-Soler, y El entusiasmo, de Luis E. Herrero.

Al director Toni Bestard le gustaría estrenar su última película, Pullman, escrita junto a Arturo Ruiz Serrano y basado en el cortometraje El viaje, en junio, “pero una historia pequeña en la jungla de estrenos veraniegos y películas aplazadas puede ser contraproducente. Si no, ya nos iríamos a septiembre”. Y se encuentra entre los que están contactando con algunas plataformas para ofrecerla a la vez en streaming. El documental Segundos fuera, programado para el 14 de mayo, es otro de los candidatos a serestrenado directamente en Amazon Prime Video y Filmin; “sería una buena opción para minimizar las pérdidas”, reconoce su director Richard Zubelzu y la productora Magda Calabrese.

Aunque en Segarra Films siguen trabajando telemáticamente, confiesan que el cierre de fronteras y vuelos cancelados han afectado a su proyecto La mujer ilegal, de Ramón Térmens, actualmente en postproducción y cuyo estreno debía ser el 12 de junio. “Es una coproducción con República Checa que actualmente ha tenido que suspender los procesos de grabación de la banda sonora, lo que afecta también a la mezcla final de sonido”. Pero es uno de los casos en que no se plantean el estreno en streaming, “ya que al ser una producción independiente no podría competir con estrenos de las majors”. Malnazidos, de Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro prevista para el 11 de septiembre, se ha quedado parada en la posproducción, con lo que su estreno se ha postergado al próximo año.

 

Otros proyectos que iban a estrenarse entre marzo y abril y se han puesto en contacto con la Academia para informar de su cancelación son: Turbulencia zombie, de Martín G. Ramis (Gabriel Morell PC); Seis días, de Juan Pablo Arroyo, y Bernard, producidas por Álex Quiroga, quien se siente afortunado de haber podido finalizar en febrero el rodaje de Almas rotas. “Hay mucho talento en el cine español, esto no nos puede frenar, tenemos la opción de trabajar online compartiendo ideas y escribiendo guiones. Y es el momento de conocer durante el confinamiento ese cine que no se vio en su momento. La cultura es un pilar más de la sociedad”, reflexiona el productor. En mayo debería llegar A este lado del mundo, la última cinta de David Trueba, interpretada por Anna Alarcón, pero parece que también se retrasa.

También han sido cancelados estrenos internacionales como The Mystery of the Pink Flamingo en el certamen americano South by Southwest. “Esto ha puesto patas al aire toda nuestra estrategia de festivales, y estamos trabajando codo con codo con Versus Entertainment y nuestra agencia de ventas, The Party Film Sales, para ver cuáles son las mejores opciones en los siguientes meses. En España tenemos festivales confirmados pero por proximidad de fechas los veo peligrar también. A nivel de cortometrajes, teníamos seleccionado María, de Paco Ruiz, en la Sección Oficial de Málaga, que nos hacía mucha ilusión, pero viendo la situación, es un mal menor”, ha confesado el productor Gerard Rodríguez.

Nuevas fechas

Algunas cintas ya tienen nueva fecha de estreno. Es el caso de Ofrenda a la tormenta, la tercera y última entrega de La Trilogía del Baztán, de Fernando González Molina que llegará a las salas el 12 de junio, y Operación Camarón, de Carlos Therón -protagonizada por Julián López y Natalia de Molina- que se ha reservado el 11 de septiembre en el calendario. Desde Zeitun Films informan que Lúa vermella, de Lois Patiño, pasa de la primavera al otoño. “Tendrá su première internacional en la Berlinale, en la sección Forum. Su estreno aquí estaba para el 24 de abril, pero hemos tomado la decisión de posponerlo al 30 de octubre, donde esperamos ya haber recobrado la normalidad”, revela el productor Javier Asenjo. Summer Films anuncia que Una vez más , de Guillermo Rojas, saltará también de casilla, del 29 de mayo al 4 de septiembre. “Nos estamos planteando hacer un estreno multiplataforma online, pero para ello necesitaríamos que las bases de los Goya de este año recogieran esa posibilidad, y que no haya una obligación de estrenar en salas durante una semana”, plantea Guillermo Rojas. Los días azules, de Laura Hojman, un documental sobre Antonio Machado, aterrizará el 27 de noviembre.

 

RODAJES INTERMITENTES Y PROYECTOS APLAZADOS

La misma avalancha y saturación que se teme ocurra con los estrenos es llevada al terreno de la producción. “Nosotros estamos trabajando con la perspectiva de volver a una cierta normalidad en junio, pero creemos que muchas de las películas que se han cancelado se van a retomar todas a la vez, con la consiguiente falta de fechas por parte de los equipos técnicos y de los actores. Esto es una cadena de transmisión y, si los proyectos que hay por delante se han visto afectados, los que estaban previstos a partir del verano también van a sufrir cambios. Ojalá pudiéramos cumplir nuestras fechas, pero creo que es más realista pensar que no va a ser así”, admite el productor Miguel González, quien considera más que probable que tengan que demorar  el rodaje de dos historias previstas para este año: No haberlos tenido, que dirigirá Víctor García León (una coproducción con Mediaset prevista para rodar en verano), y Holy Blood, una coproducción con La Canica Films a cargo de Jesús Font, que esperaba rodarse en octubre o noviembre.

Félix Tusell, productor ejecutivo y director de Estela Films, explica que para un productor esta situación es “profundamente estresante, pues de nosotros se espera planificación, manejar diferentes escenarios, controlar plazos y tener previstas contingencias, pero este escenario de absoluta incertidumbre dicta un vivir al día de lo más difícil de integrar en la normal y aconsejable mentalidad de producción”.

“Desde Ikiru Films y La Terraza Films acabamos de detener la adaptación de la novela de Javier Cercas, Las leyes de la frontera, que va a dirigir Daniel Monzón”, explica el productor Edmon Roch. Estaban en la fase de preproducción y contaban con el grueso del equipo incorporado y esperando rodar a partir del próximo 14 de mayo. “No podremos precisar el impacto económico exacto que nos supone este retraso hasta saber mejor cómo evoluciona la situación y cuándo podremos comenzar a filmar, pero de entrada supondrá la duplicación de los trabajos que tengan que trasladarse a nuevos equipos, la pérdida de las condiciones negociadas con proveedores y técnicos que, presumiblemente, cuando se retome la actividad y ante el incremento de la demanda, también aumentarán los precios de contratación. Habrá localizaciones que perderemos por su estacionalidad, y procesos y trabajos que se tendrán que duplicar ante esta interrupción. El resto de nuestros proyectos no estaba con equipos incorporados, pero también supondrá un replanteamiento severo de fechas de rodaje y financiación”, recalca. Tienen además el documental Sanmao. La novia del desierto, de Ana Pérez y Marta Arribas, que concursaba en sección oficial en Málaga, Barcelona Film Fest, Hot Docs y Festival Cine de Mujeres. “Los cuatro festivales se han pospuesto. Teníamos fecha prevista de estreno en cines este mayo de la mano de ACF/Sherlock y ahora no tenemos todavía nueva fecha propuesta a la espera de ver cómo evoluciona la situación, con la debilidad añadida de tratarse de un documental”, advierte.

La productora Esther García (El Deseo) cuenta también cómo les afectó la llegada del COVID-19. “Estábamos preparando el rodaje del corto queiba a dirigir Pedro Almodóvar con Tilda Swinton, inspirado en la obra de teatro de un acto de Jean Cocteau, La voz humana, que iba a tener lugar en Madrid en abril. La pasada semana suspendimos la construcción de decorados, que estaba avanzado en un 70%. Los equipos de producción, arte y vestuario estaban incorporados desde principios de febrero. El decorado seguirá instalado en el estudio donde esperábamos rodar la ultima semana del mes de abril. Nuestro deseo es que esto pase pronto y podamos retomar la actividad, pero sabemos que tendremos dificultades con el equipo técnico y artístico, además de un coste adicional por el tiempo que estemos parados con un decorado ocupando un estudio”, concluye.

Otro rodajes afectados son: Los ojos de Europa, segundo volumen de la ‘trilogía europea’ de Juan Pinzás, cuyo rodaje iba a tener lugar esta primavera y se han visto obligados a retrasarlo para el próximo otoño; Incitatus, el caballo Senador, un corto de animación en técnica 2D, una sátira sobre la situación política española y el lenguaje inclusivo de los últimos años, ambientada en la Roma de Calígula, según ha anunciado su productor José Antonio Saura; El que sabem (Lo que sabemos), primer largometraje del valenciano Jordi Núñez que, como explica el productor y realizador Marco Lledó (Pegatum) baraja en principio dos fechas para empezar a rodar: “una más inmediata, en cuanto se levanten las restricciones, y otra en octubre. El 16 de marzo se incorporaban dos personas para arrancar la preproducción, y el 14 de abril entraban el resto de los equipos para el inicio de rodaje el 4 de mayo”. Y explica los dos escenarios posibles: “en el primer caso, el impacto no sería traumático porque hemos conseguido bloquear proveedores, técnicos y artistas hasta verano. Sin embargo, en el segundo caso, el equipo técnico va a sufrir cambios. Posponer a otoño también va a suponer la alteración del plan de financiación y un cambio en el plan de distribución, que nos obliga a replantear estrategia de festivales y ventas”, explica José Carlos de Isla, co-CEO y productor de Sarao Films, retomará Historias del agua cuando la situación lo permita, “pero nuestra temática es estacional, y puede darse que cuando vayamos a esos rodajes ya no haya agua en abundancia”, puntualiza.

En Distinto Films han decidido aplazar al mes de junio dos rodajes que tenían previstos para este próximo mes de mayo: un largometraje de ficción y una película para televisión dirigida por Laura Mañá. «El largometraje es Vasil, la ópera prima de la directora novel Avelina Prat. Es la historia de un inmigrante búlgaro que dormía en la calle, a pesar de ser un campeón de bridge y de ajedrez, hasta que es acogido por un jubilado y ambos hombres crean su propia y curiosa rutina. «De momento no hemos tenido problemas con la disponibilidad del equipo, aunque está claro que esta es una situación imprevisible y que podrían darse cambios. De todas formas, esperamos que para entonces los esfuerzos de contención del virus hayan surtido efecto y podamos cumplir con este nuevo calendario», ha declarado Alba Gómez desde la productora.

 

 

Rodajes interrumpidos

Competencia oficial fue una de las primeras películas que empezaron a cancelarse ante la alarma sanitaria que fue creciendo e imponiéndose en el día a día. Mediapro anunció la “interrupción temporal” de su rodaje. La película de los argentinos Mariano Cohn y Gastón Duprat, protagonizada por Penélope Cruz, Antonio Banderas y Óscar Martínez, se paró el pasado 12 de marzo adoptando las medidas de seguridad y responsabilidad “hacia los equipos de rodaje, ante la inquietud de sus miembros y para permitirles hacer frente a sus necesidades familiares, especialmente tras el cierre de los colegios en Madrid”.

¿Qué hicimos mal? de Liliana Torres, tenía previsto “rodar hasta el día 22 de marzo, pero hemos tenido que cancelarlo y que el equipo volviese a España antes de tiempo. Adelantaron todo lo posible en México y acabaremos el rodaje aquí en España cuando sea posible”, desvela la productora Vanesa Viñuela. La Mirada Oblicua se ha visto obligado a parar el documental Cachita, la esclavitud borrada: “estábamos de rodaje en Barcelona, se ha anulado las dos semanas siguientes en Huelva, Granada, Lisboa y Senegal. Esperamos cuantificar los gastos que conlleva todo esto y retomar en cuanto podamos porque tenemos compromisos de entrega”. También la cinta de ficción Yo te llevo, que se encontraba en fase de desarrollo y financiación: “todo queda pospuesto y habrá que hacer nuevo calendario. La financiación es lo que vemos más complicado por la caída de la economía por esta crisis”, ha manifestado el productor Álvaro Begines.

El director de cine, Víctor Matellano cuenta la situación de Vampus Horror Tales (título provisional), un largometraje-antología de terror, con fotografía en blanco y negro y formato Scope, en fase de rodaje que dirige junto a Manuel M. Velasco, Isaac Berrokal y Piter Moreira. “Estaba planteado en dos fases de filmación. La primera se inició, como consta en el ICAA, el 18 de febrero, y afortunadamente la hemos podido completar. Teníamos previsto iniciar la segunda fase a finales de de marzo, pero previsiblemente se retrasará. En total, hemos filmado como un  70% de la película y, en este caso, la propia estructura de segmentos facilita la continuidad, ya que se trata de historias independientes que vamos rodando de principio a fin en cada bloque de rodaje”.

El director y productor José Antonio Hergueta (MLK Producciones) comunica tres proyectos afectados: “el rodaje del documental A este lado de la carretera, que nos costó poner en marcha y empezó a grabarse en diciembre 2019, cuando ahora ya estaba en la fase más intensa de seguimientos a la banda Danza Invisible, se nos ha paralizado todo. Tendremos que continuar en cuanto sea posible, interrumpida la planificación que implicaba terminarlo en verano 2020, aunque estamos aprovechando para montar todo el material grabado y los archivos localizados”. También la posproducción del cortometraje documental Paraíso en llamas, rodado hace unos meses y al que le quedaban algunos recursos por grabar, “pero sobre todo cara a su difusión”.

“El 13 de marzo paramos el rodaje de Ilargi Guztiak. Todas las lunas, segunda película de Igor Legarreta. Nos quedaban tres semanas para terminar. No creo que tengamos demasiados problemas para retomar, salvo que esto se alargue mucho, porque nuestra protagonista es una niña de 12 años y dentro de 6 meses puede haber cambiado significativamente de aspecto”, informa el productor David Naranjo.

También se estaba trabajando en el documental de el director y coproductor Miguel Ángel Calvo Buttini, El siglo de Galdós, de Salto de Eje; el productor Eduardo Carneros cuenta que han tenido que paralizar el rodaje del cortometraje Alegrías riojanas, de Velasco Broca. En Estela Films han detenido dos cortometrajes que tenían fijados en la última semana de marzo y la primera de abril: “Los conspiradores, escrito y dirigido por Luis E. Parés y protagonizado por María Hervás; y Palabras en penumbra, escrito y dirigido por Gonzalo Suárez, con Ernesto Alterio, Bárbara Lennie, Charo López, Ana Álvarez y José María Pou. Ambos presentan la dificultad de volver a acordar las agendas de todos los implicados, con la gravedad adicional de la previsible acumulación de proyectos para cuando se retome la actividad actual y el más que probable colapso de compromisos del personal técnico y artístico”, explica el productor ejecutivo Félix Tusell.

El director y productor austriaco afincado en España, Günter Schwaiger (Desde que el mundo es mundo) de DIM DIM Productions (antes Mosolov-P) también ha tenido que parar el prerodaje en Austria de su nueva película documental, Braunau, así como la presencia en muchos festivales –que se han cancelado o pospuesto– donde iba a ir El buzo, además de detener la investigación de dos proyectos documentales planificadas entre marzo y julio de este año: Sex not War y Women Masters. Y, Venus, la ópera prima de Víctor Conde, un largometraje que adapta la obra de teatro homónima estrenada en 2017 y recupera para la gran pantalla al elenco original que la protagonizó sobre las tablas tiene ha tenido que detener la posproducción.